Con el Proyecto Fiberclean, se espera reducir o eliminar las microfibras de la cadena de valor con el uso de diferentes tecnologías, desde el desarrollo de nuevos tejidos y textiles sino también en sistemas de minimización eficientes, y finalmente en grandes plantas de tratamiento de aguas residuales que pueden evitar que estas microfibras lleguen al medio marino a través del agua residual contaminada.